
Esta necesidad del hombre civilizado de ordenar, clasificar y organizar nos lleva a tener una percepción cuadriculada de los conceptos de la historia. Las referencias que han intervenido en la creación de obras a lo largo de la historia no está ligado a un tiempo ordenado. La naturaleza da saltos inexplicables. La historia del hombre consiste en un estéril esfuerzo de comprender y tender épicos puentes entre abruptos hiatos.